lunes, 11 de agosto de 2008

Usuarios poltergeist

En el mostrador en el que me encuentro ahora mismo, nos encargamos, entre otras muchas cosas, de gestionar los libros que se piden a otras bibliotecas para que el usuario no tenga que desplazarse a las mismas. A la persona que lo pide sólo le supone un pequeño dispendio, mientras que tras el telón hay toda una maquinaria de logística que no viene al caso. El último eslabón de esa cadena supone llamar a la persona que ha realizado el pedido para avisarle de la llegada del libro en cuestión. Mi compañero estaba en esa labor cuando cuelga el teléfono, se gira y me dice:

- Y yo que pensaba que la bromita de respirar sobre el auricular ya estaba pasada de moda. Ahora mismo me han cogido el teléfono y sólo se oía respirar; eso sí, fuerte.

Yo también me he sorprendido. No en vano es una broma que parece tan vieja como el invento, y que ha salido en multitud de chistes y escenas de filmes, aunque en este caso estaba sucediendo al revés: nosotros llamábamos y la respiración la ponía el receptor.
Esto no habría pasado de una mera anécdota a olvidar si no fuese por lo sucedido un par de horas después. Entra una usuaria y con paso firme y enérgico se dirige directa a nuestro mostrador:

- ¡Hola! Creo que me habéis llamado, porque me he encontrado el teléfono descolgado cuando he llegado a casa.


¿?


- Sí, es que mi perra tiene la manía de descolgar el teléfono cuando suena, ¿sabéis? Con la pata. Y como tenía reservas de aquí me he dicho "Seguro que me han llamado de la biblio".

1 comentario:

Eli Ramirez. dijo...

jajajaj
la gente va de mal en peor XDDD